Santa Cruz surgió marcada por el anhelo de formar una sociedad con personas solidarias para que con el esfuerzo mancomunado forjaran mejores días. El 24 de septiembre de 1.810 se conmemora el grito libertario por la independencia de Santa Cruz contra el dominio español, este solo hecho demuestra la convicción de ser y existir del cruceño sin yugos frente a ejercicios abusivos de poder.

La ruptura con el poder colonial perseguía sobreponerse a una situación que  era adversa, perjudicial y retrógrada; el grito independentista cruceño reflejó el anhelo de lograr un porvenir que le sea venturoso.

Durante la era colonial las relaciones con el poder central no fueron del todo armoniosas; tampoco lo fue en la época republicana y menos aún hoy en día, en  esta nueva era denominada plurinacional, donde ni siquiera la mayoría de los cruceños hemos tenido el derecho de autodenominarnos e identificarnos con una de las 36 naciones reconocidas en nuestra CPE.

Tanto en la época republicana como en la actualidad los gobernantes de turno, han concebido al Estado desde su sola perspectiva centralista, descartando toda propuesta regional que pudiera contradecirla. A pesar de ello, cruceños visionarios recurrieron a la fuerza y voluntad del pueblo construyendo un solo modelo socio-económico que ha elevado el nivel de vida de todos sus habitantes.

Ese sentimiento cruceño acompañó las luchas cívicas que hoy con orgullo nos permite exhibir un proyecto de vida en común, concebido a partir del respeto al ser humano, a las leyes y al amor por nuestra tierra, valores estos que actualmente están siendo sistemáticamente destruidos. Sin embargo,  hoy vemos la realidad nacional con mucha preocupación, donde la pérdida de independencia de las principales instituciones del Estado, el desamparo de la propiedad, la falta de seguridad, los ataques a la libertad de expresión, la judicialización de la política, los intentos, en unos casos velados y en otros directos, por destruir todo el sistema productivo regional, hacen posible sostener con absoluta certeza que estamos viviendo un presente muy incierto.

El infundado miedo a la supuesta separación o independencia del oriente boliviano hace que las autoridades nacionales trunquen el desarrollo y progreso de nuestros pueblos.

Estos 200 años de liberación certifican que Santa Cruz siempre luchó en beneficio del país, dando lugar a  la conquista de las regalías petroleras del 11%, que costó la vida de ilustres cruceños; la consolidación de la autonomía municipal para la elección de alcaldes; la elección directa de prefectos y,  últimamente,  las Autonomías Departamentales, constituyen hechos históricos que demuestran el fervor cívico y el patriotismo de los cruceños, con un sentido de bolivianidad poco comprendido por los gobernantes.

En esta fecha tan importante que conmemoramos el bicentenario de la independencia de Santa Cruz, los profesionales como protagonistas y forjadores de esta productiva y noble región manifestamos nuestra preocupación y al mismo tiempo exhortamos:

1º.- A los líderes de la región: mantener decisiones firmes y decididas, puesto que la sumisión sólo estimula el abuso de los que ostentan el poder político.

2º.- A nuestras autoridades departamentales: cumplir con el rol histórico que el momento les exige, haciendo prevalecer los valores que cohesionan y permiten proyectar a nuestro departamento en  paz,  con seguridad social y desarrollo económico y cultural.

3º.-  A las autoridades nacionales y a los ciudadanos bolivianos: restablecer el sistema  democrático, continuando con el proceso iniciado con la descentralización,  hacia las autonomías plenas y de ser necesario llegar al federalismo pedido por los hermanos potosinos y paceños.

4º.- A las autoridades nacionales: respetar el estado de derecho, la seguridad jurídica y  la democracia participativa, donde los ciudadanos conozcamos nuestros derechos, garantías y que se respete la voluntad expresada en el ejercicio del voto ciudadano.

5º.- A las autoridades nacionales de los distintos órganos de poder: respetar la independencia de los poderes del Estado como base fundamental de la democracia y el equilibrio constitucional del Estado de Derecho.

6º.- A las autoridades de fiscalización correspondientes: respetar los recursos naturales, a la biodiversidad y el manejo sostenible de los mismos como base fundamental del desarrollo de nuestros pueblos.

7º.- Al gobierno central y departamental: implementar una educación descentralizada, competitiva e innovadora, libre de la injerencia política.

8.-  Al gobierno central y a las autoridades correspondientes:  ejercer una lucha frontal contra el narcotráfico, el más grande de los flagelos de la humanidad que atenta contra la vida y salud de nuestros niños, jóvenes y adultos, debiendo atacarse no sólo la fabricación y el tráfico, sino la producción excedentaria de la hoja de coca.

Por ultimo los profesionales de Santa Cruz:

Pedimos a nuestras autoridades departamentales y municipales que inmediatamente pongan en marcha la autonomía departamental y sigan luchando por la transferencia de las competencias para tener una autonomía real y plena, sin importar el color político ni los intereses personales o partidarios; caso contrario, a quienes no cumplan su función para la cual fueron elegidos, se les deberá revocar el mandato.

Santa Cruz de la Sierra, 30 septiembre de 2010

EL DIRECTORIO